En un esfuerzo por mejorar la calidad de vida de los adultos mayores, personas con discapacidad y otros grupos vulnerables, en Chiquilistlán, Jalisco, la fundación GANA (Grupo de Ayuda a Niños y Ancianos AC) en colaboración con el ITESO (Universidad Jesuita de Guadalajara) ha iniciado un ambicioso proyecto de renovación y mejora de las instalaciones físicas de varios servicios esenciales.

De acuerdo con el censo de población del Inegi del 2020, Chiquilistlán tiene una población de 5 mil 983 habitantes, de los cuales 97 personas tienen discapacidad física, 74 personas discapacidad visual y discapacidad auditiva la tienen 54 personas.

Este proyecto de aplicación profesional busca reparar, adaptar y optimizar las áreas de Odontología, Rayos X, Rehabilitación Física, Baños Públicos y el Salón de Usos Múltiples, infraestructura vital para la comunidad, por lo que se ha iniciado una campaña de recaudación de fondos para poder atender a los pacientes.

El edificio original, construido para uso exclusivo de estos grupos vulnerables, ha experimentado un notable desgaste debido al constante uso y la falta de mantenimiento. La urgencia de esta renovación radica en la necesidad de garantizar la seguridad de los beneficiarios y aumentar la capacidad y calidad de atención en las áreas descritas.

“Con esta mejora, podremos re-abrir la atención odontológica, talleres de capacitación y los programas para el envejecimiento saludable y terapia física para nuestros adultos mayores, personas con discapacidad y otros grupos vulnerables en concordancia con lo establecido por la Organización Mundial de la Salud, Las Naciones Unidas y la Agenda 20-30”, contó Daniel Ramos.

El Salón de Usos Múltiples, renovado y adaptado, ofrecerá nuevamente un espacio seguro y adecuado para la realización de eventos, conferencias, talleres de baile, canto y teatro, cumpliendo con los lineamientos de Protección Civil Municipal. Además, está catalogado como un albergue autorizado en caso de emergencia, garantizando un refugio seguro para la comunidad.

Este proyecto es especialmente significativo para el municipio de Chiquilistlán, una zona marcada por la pobreza. La renovación de estas instalaciones permitirá ofrecer servicios de calidad a la población vulnerable, beneficiando a al menos 300 familias. La colaboración entre GANA y el ITESO no solo representa una mejora en la infraestructura, sino también un compromiso con el bienestar y la dignidad de los más necesitados.

La renovación de las instalaciones es un paso crucial para reactivar los servicios y programas que tanto necesitan los adultos mayores y otros grupos vulnerables. Esta iniciativa no solo mejora la infraestructura física, sino que también representa un esfuerzo conjunto por brindar una vida mejor y más digna a aquellos que más lo necesitan.

En un contexto donde la pobreza y la falta de recursos son una constante, este proyecto brinda una respuesta concreta y esperanzadora para mejorar la calidad de vida de cientos de familias en Chiquilistlán.

¿Deseas sumarte a la causa? Puedes donar aquí: https://gofund.me/b2134fe6