No es disparatado pensar que el senador Ricardo Monreal esté haciendo el trabajo sucio a alguien que, por alguna razón, no se atreve, no puede o no quiere presentar las polémicas iniciativas que el también coordinador de la fracción de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ha intentado sin éxito llevar recientemente al pleno de la Cámara alta. Lo cierto es que, por segunda ocasión consecutiva en los últimos meses, Monreal ha caído en oprobios que lo han dejado muy mal parado frente a la opinión pública y ni qué hablar de las redes sociales contra las cuales también ha atentado sufriendo el vilipendio de quienes suelen habitar el ciberespacio.
Hay que recordar que en lo que constituyó su primer intento fallido, el senador Monreal pretendió en diciembre pasado modificar la Ley del Banco de México, propuesta que no pocos especialistas apuntaban convertiría a la institución en una “gran lavadora de dinero”.
Su proyecto de iniciativa proponía obligar al banco central, a comprar el excedente de dólares en efectivo que entrasen a la economía nacional y que los integraran a las reservas internacionales, que hoy rondan los 200,000 millones de dólares.
Justo cuando se presentó, en noviembre pasado, la iniciativa en el Senado de la República, Banco de México, gobernado por Alejandro Díaz de León de inmediato prendió los focos rojos y advirtió que la iniciativa vulneraba la autonomía de la institución al obligarla a realizar ese tipo de operaciones, además de que la colocaría en riesgo de incurrir en lavado de dinero.
La iniciativa que presentó el legislador morenista para hacer realidad esa intención –aprobada en “fast track” en el Senado–, fue contenida en la Cámara de Diputados, frente a la enorme oleada de preocupación y oposición que generó, no sólo en el banco central, sino entre los bancos nacionales. Se dijo que se realizaría un parlamento abierto para escuchar todas las voces.
CitiBanamex advirtió en un análisis al respecto que con tal iniciativa se había cruzado la “línea roja” en torno a la autonomía del organismo central.
e acuerdo con Banxico de enero a septiembre de 2020, “las instituciones que captaron dólares, lograron colocar en territorio nacional y exportar el 98% del monto total captado; el restante 2%, que representó 102 millones de dólares, corresponde al excedente que dichas instituciones acumularon en sus bóvedas durante este periodo”.
En la discusión pública sobre el tema ha quedado claro que las corresponsalías bancarias han endurecido los requisitos que tienen que cumplir los bancos que operan en México, para aceptar los dólares, precisamente para hacer más efectivo el filtro que evita que se reciclen dólares provenientes de actividades ilícitas.
El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, manifestó desde diciembre pasado que la iniciativa de reforma a la ley de Banxico, propuesta por la bancada morenista, no solucionaría el problema que tienen las instituciones financieras con los excedentes que tienen de moneda extranjera. Advirtió que la iniciativa de reforma sólo trasladaría el problema al Banco de México.
A finales del mes pasado, Alejandro Díaz de León, gobernador del Banco de México, y Arturo Herrera, secretario de Hacienda, en conjunto con la Asociación de Bancos de México y la CNBV, anunciaron un programa de apoyo a migrantes al facilitarles abrir cuentas bancarias para que sus familiares puedan cambiar las remesas a un mejor tipo de cambio, con lo que lograron desactivar uno de los riesgos para la economía en este 2021, “que era la iniciativa de Ricardo Monreal para reformar la Ley del Banco de México, al obligarlo a comprar dólares en efectivo que no pueden ser repatriados a Estados Unidos”.
Con dicha estrategia quedó desactivada la que fue considerada también como “una bomba de tiempo” propuesta por el senador Monreal, y que muchos advirtieron solo buscaba favorecer al Banco Azteca y su dueño, Ricardo Salinas Pliego.
La más reciente polémica del coordinador de Morena, corresponde a su deseo de “regular” las redes sociales, pero que se ha interpretado como una nueva forma de censura a estas plataformas de comunicación.
Los planteamientos clave de la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión propuesta por Monreal son los siguientes:
1.- La iniciativa contempla regular las redes sociales que tengan más de 1 millón de usuarios, como Facebook, Twitter, Instagram o TikTok.
2.- Para poder operar, estas redes requerirán autorización del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), un organismo autónomo creado en 2013 cuyo titular es propuesto por el presidente ante el Senado.
3.– Las redes podrán establecer mecanismos para suspender o eliminar cuentas y contenidos de acuerdo con términos previamente autorizados por el IFT.
4.- Sólo podrán eliminarse o suspenderse cuentas y contenidos que difundan noticias falsas, expresen mensajes de odio, afecten a los derechos de los menores de edad, revelen datos personales o provoquen algún delito.
5.- Las redes sociales deberán tener un procedimiento interno para impugnar la suspensión de cuentas y contenidos que sea resuelto en un plazo máximo de 24 horas y atendido por personas especialistas en derechos humanos y libertad de expresión.
6.- En caso de que las redes sociales no resuelvan la impugnación, se podrá presentar una queja por violación a la libertad de expresión ante el IFT, que ejercerá como árbitro entre las partes.
7.- Si se acreditaran violaciones a la libertad de expresión, se prevén multas de hasta 89.62 millones de pesos (4.4 millones de dólares)”.(EFE09/02/2021).
Sissi de la Peña, gerente de comercio digital de la Asociación Latinoamericana de Internet (ALAI), dice que la probable regulación de redes nos debe importar a todos y que es un debate que no puede cubrirse en las tres semanas que Monreal puso como límite para presentar su propuesta.
La ALAI, que incluye la representación de voces de Twitter y Facebook, ya hizo pública su postura y en ella se arrojaron preocupaciones por la probable violación a la naturaleza descentralizada y libre de Internet, y por el impacto negativo al desarrollo digital y económico de México, un país que además tiene suscrito el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Esta iniciativa viola el Capítulo 19 del T-MEC, pues pone barreras injustificadas al comercio digital y genera incertidumbre al limitar al flujo transfronterizo de datos, además de que apuesta por un trato discriminatorio a las redes sociales en México, una situación que desde luego no se presenta en Canadá ni Estados Unidos. Se supone que con el T-MEC estamos homologando principios para fomentar el desarrollo digital entre las tres naciones, pero ahora nuestro país pretende someter todo a las decisiones de un órgano autónomo, como lo es el IFT”, dice De la Peña.
Un punto que le intriga es la premura de pasar una iniciativa de regulación de redes al Congreso, cuando la Secretaría de Economía ya estaba trabajando en un mecanismo que incluía aportaciones de múltiples actores.
AL FINAL, RECORDÓ QUE UNA REGULACIÓN DE REDES SOCIALES PUEDE SER CONTRAPRODUCENTE Y CONVERTIRSE EN UNA HERRAMIENTA DE CENSURA DEL ESTADO.
“Si el gobierno dice ‘Yo no valido tu mecanismo de suspensión de cuentas, es necesario que esto lo analice un ente gubernamental’, por supuesto que se puede pensar en la imposición de un mecanismo a la libertad de expresión”, reflexiona antes de decir que la propuesta de Monreal no tiene por qué terminar como iniciativa de ley, pues es un debate que no puede terminar en tres semanas.
Hay que recordar que en México, las redes sociales han jugado un papel fundamental en el tema político-Electoral; el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en mucho les debe su triunfo de julio de 2018, las bautizó como “las benditas redes sociales”.
Pero al parecer, el mandatario ya va perdiendo la partida en estas formas de comunicación y ello tiene que ver con el decrecimiento económico, las altas cifras de desempleo, las polémicas obras como Dos Bocas, El Tren Maya, El aeropuerto de Santa Lucía, el alto índice de muertes violentas, la inseguridad, el fracasado manejo de la pandemia y el fallido plan de vacunación contra la COVID.
Las redes sociales le están pasando factura al actual régimen, y quizá la mano de López esté detrás de este nuevo escándalo en el que se encuentra el senador Monreal, quien está cerca nuevamente de quedarse con su iniciativa en las manos.
La pregunta es: ¿estará Monreal haciendo el trabajo sucio a la Cuarta Transformación, o será de “motu proprio” tan graves tropiezos?